ANTICIPO DE FACTURAS PARA EMPRESAS Y PYMES

Anticipo de facturas y cobertura de una necesidad empresarial básica

En el mundo empresarial, muchas de las facturas que se emiten no se cobran al momento, sino que se cobran a determinados días vista (en la mayoría de casos ciertamente demasiados cabe añadir). Esta realidad de pagos aplazados, que supone en la práctica financiar a los clientes que adquieren los productos y/o servicios de la empresa, implica muchas veces poner contra las cuerdas a la tesorería de la empresa poniendo al límite los problemas de liquidez de muchas empresas.

Ante estos problemas de tensiones en tesorería, ante los problemas de falta de liquidez, pueden establecerse distintas estrategias. Una de ellas es intentar reducir los plazos de pago en las facturas, pero esa realidad es inviable pues en muchas ocasiones se está sujeto a las condiciones que establece el cliente y las mismas no se pueden modificar de no querer perder al cliente (y bien puede ser que en algunos casos salga paradójicamente rentable dejar perder a un cliente a cambio de no tener que esperar al cobro de las facturas que le emitimos, pero en muchas ocasiones con muchísimos clientes puede suponer un desastre dejarles escapar), así que en muchos casos, total o parcialmente, conviene recurrir a la financiación para poder mejorar la liquidez y aliviar las posibles tensiones que se presenten.

Y es en el punto anterior donde entra en juego la figura del anticipo de facturas. En el anticipo de facturas se encuentra uno de los elementos más simples y sencillos para cobrar rápidamente las facturas aun y cuando no haya llegado la fecha de pago de las mismas

Distintos tipos de anticipo de facturas

El mecanismo de funcionamiento del anticipo de facturas es bien simple. Se contacta con Kontactalia Finance y a través de la compañía el cliente se desprende de las facturas que tiene pendientes de cobrar y recibe rápidamente el importe de las mismas.

En realidad, existe una gran variedad de opciones llegado el momento de poner en práctica el anticipo de facturas:

Por un lado, puede decirse que existe el anticipo de facturas individual y ocasional. Este tipo de anticipo de facturas es ideal para aliviar situaciones puntuales de estrés en la tesorería, para cubrir picos de necesidad de liquidez y se basa en aportar a la compañía que anticipará la factura la concreta o concretas facturas a anticipar. Después de firmar el acuerdo de anticipo de facturas el cliente recibirá el importe en cuestión y punto.

Por otro lado, existe el anticipo de facturas regular. Mediante esta modalidad de anticipo de facturas se establece una relación regular entre quien anticipa las facturas y la empresa que recibe el anticipo. Dicho de otro modo, la empresa va enviando las facturas pendientes de cobro que va emitiendo y se le van anticipando.

Esta última modalidad de anticipo de facturas mencionada resulta interesante para establecer una línea estable de liquidez y limitar el impacto en tesorería de forma sostenida por los tiempos de pago de los clientes que se tengan. Además, otra de las ventajas de este tipo de relaciones, es poder establecer una forma externalizada para la impresa de las gestiones de cobro, y llegado el caso de recobro, de las facturas cedidas para su anticipo.

Costes asequibles y transparentes en el anticipo de facturas

Por supuesto, financiarse mediante el anticipo de facturas supone un coste. Del mismo modo que cualquier otro tipo de operación financiera de financiación existe un coste asociado que debe asumirse a cambio de tener liquidez rápida e inmediata.

Las condiciones que pueden ofrecer para el anticipo de facturas las distintas empresas que operan en el sector pueden ser muy diversas, por eso es interesante focalizarse en empresas que cuenten con una contrastada trayectoria y una sólida reputación como Kontactalia Finance para que las condiciones que se obtengan sean las mejores y más óptimas.

Es importante que los costes de financiación que se asuman sean sostenibles por quien debe soportarlos y resulta muy importante que los mismos sean nítidos y transparentes para poder conocer en todo momento los costes asociados, los costes aparejados a la operación.

A grandes rasgos, decir que en el ámbito del anticipo de facturas existe diversidad de costes según el ente financiador.

Costes en los que potencialmente se puede incurrir

En primer lugar, el coste más claro y esencial es el tipo de interés a satisfacer por las cantidades anticipadas. Este tipo de interés debe tenerse presente que puede resultar variable y escalable según el riesgo de los clientes que se tengan que hayan emitido las facturas.

Otro coste asociado al anticipo de facturas pueden ser costes asociados a una comisión por estudio de las operaciones de financiación.  También resulta habitual que dentro del anticipo de facturas puedan existir servicios de valor añadido por los cuales algunas empresas de anticipo de facturas carguen tarifas al respecto. Algunos de los conceptos más comunes son los gastos de administración o de gestiones de cobro o recobro.

Estas operaciones de anticipo de facturas también pueden llevar aparejados costes relacionados con los trámites de formalización (notarios, etc.), como podría sueceder en préstamos hipotecarios para pymes.

Y un tipo de coste que puede llevar incorporado, de forma opcional, es una comisión para hacer que las operaciones de anticipo de facturas sean sin recurso. Esto significa que en caso de que esa factura sea impagada por el  cliente que la debe pagar quien asumirá el impago sea la entidad que financia el anticipo de factura. Por el contrario, si la modalidad es “con recurso” el que asumirá el impago es el receptor de la factura impagada. Puede suponer un coste, pero también una tranquilidad de que se cobrará sin problemas y sin dar lugar a la posibilidad de impago.