Diferencias entre renting y leasing para empresas
Sin duda alguna, un gran número de empresas ha descubierto las ventajas y bondades del leasing para empresas y su importancia no ha parado de crecer en los últimos lustros. Pero a pesar de este gran desarrollo y consolidación en el tejido empresarial aún existen algunos puntos de desconocimiento, o mejor dicho de confusión con algunos aspectos del leasing para pymes. Siendo uno de los asuntos de error o confusión más importantes el relacionado en la mezcla de conceptos entre el leasing para empresas y el renting para empresas.
Para muchas personas el concepto de leasing y el de renting son análogos, iguales, plenamente equivalentes, y ello no es así. Cierto es que el leasing para empresas y el renting para empresas puede decirse que son primos/hermanos con grandes parecidos entre sí y con muchos aspectos en común, pero cierto es también que este cierto parecido no les iguala ni hace que técnicamente sean iguales.
Así, y expresado de un modo muy resumido y coloquial, puede decirse que mientras el renting está planteado cómo un mero alquiler a largo plazo en el cual se pagan unas determinadas cuotas durante un determinado plazo de tiempo y que el pago de esas cuotas da derecho al disfrute del bien mientras dura el contrato y a un conjunto de servicios incorporados (mantenimiento, impuestos incluidos, etc.), y que a la finalización del contrato el bien se retorna y punto (y sin perjuicio de que, aun y no siendo el objeto principal del renting, pueda prolongarse el contrato con un vehículo nuevo, adquirir el que ya se venía disfrutando abonando una determinada cantidad económica, etc.) en el supuesto del leasing para empresas es distinto.
En el supuesto del leasing para pymes de entrada el objeto de la operación es adquirir un bien para finalmente adquirirlo en propiedad. Se articula también con el pago de unas cuotas durante un determinado periodo de tiempo y al final se paga una determinada cantidad para hacerse con la propiedad del bien. Dicho de otro modo, equivale más a un alquiler con opción de compra, y normalmente esta opción no incluye la gama de servicios adicionales incluidos (mantenimiento, etc.) que sí que incluye el renting.