El Instituto de Crédito Oficial, por sus siglas ICO, ha participado de forma activa en la ronda de financiación orientada a renovar la flota de trenes y convoyes del Metro de Barcelona.
El ICO aporta 54 millones de euros de cara a retirar aquel material más antiguo todavía operativo en la red ferroviaria. También colabora en el Banco Europeo de Inversiones bajo el paraguas del denominado Plan Juncker, que vimos en otro post, con 205 millones de euros.
Operación conjunta de financiación corporativa
La operación de financiación tiene como objetivo renovar 42 trenes de la red de Metro de Barcelona, en concreto los más antiguos y que llevan más años en servicio. La operación se cerró el pasado día 7 de octubre, con la estampación de la firma en los contratos de suministro de los trenes al operador encargado de la gestión de la red de metro de la ciudad, la empresa Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) así como el Instituto de Crédito Oficial, el Banco Europeo de Inversiones, el Institut Catalá de Finances y un reducido grupo de entidades a nivel privado. El conjunto de la operación está valorado 268 millones de euros. El acuerdo suscitado permite a TMB acceder a varias líneas de financiación con devolución a muy largo plazo.
Mejor movilidad y más sostenible
Los 54 millones de euros aportados por ICO contribuirán a la consolidación del proyecto de mejora de la infraestructura pública de transportes, orientada mayoritariamente a la mejora de la movilidad sostenible. Los 42 convoyes que se pretende sustituir llevan en circulación desde hace más de 35 años. Los nuevos trenes que les sustituirán cuentan con avances tecnológicos de cara a mejorar la seguridad, reducir los tiempos de espera y proporcionar un mejor confort durante el servicio y la circulación. Estos nuevos trenes también aumentan la capacidad de los vagones, que podrán transportar hasta 1100 pasajeros para los trenes que circulan por la L1 (línea roja) y hasta 900 para los que circulen por la L3 (línea verde).
Fabricación y entrega de los nuevos trenes
La fabricación de estos nuevos convoyes, que serán entregados a principios de 2020 la llevará a cabo la empresa Alstom, ganadora de un concurso público abierto a tal fin. El concurso público que abrió TMB para la fabricación de estos nuevos trenes tenía como objetivo introducir en la línea de metro de Barcelona vagones que cumplieran con los altos criterios de sostenibilidad fijados por el operador:
- Estructuras ligeras
- Alta tasa de recuperabilidad de materiales una vez terminada su vida útil
- Fiabilidad técnica y facilidad de mantenimiento
- Bajo consumo energético
Los trenes se construirán en la factoría que Alstom tiene en Santa Perpetua de Mogoda. Los nuevos trenes consumen hasta un 20% menos de electricidad y serán más silenciosos que los que actualmente se encuentran en circulación.
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