El Instituto Económico Mundial de Kiel (en alemán denominado IfW) acaba de alertar que el motor de la UE, Alemania, con toda probabilidad entrará en recesión en algún momento del último trimestre de 2019 y que la economía del país seguirá en una espiral de deterioro hasta 2021. Alemania no registra déficit económico desde el año 2011.
La economía de alemania se encuentra frente a uno de los años más frágiles a nivel económico desde el estallido de la burbuja de crédito en 2008, según palabras del propio IWf.
Imagen superior: centro histórico de Colonia, Alemania
Alemania entra en recesión técnica
Los expertos y economistas del instituto IWf pronostican que el PIB del país crecerá solamente un 0,4% durante el global de 2019, sin embargo se considera recesión técnica cuando un país encadena dos trimestres consecutivos de contracción económica. Ya en el segundo trimestre del año el PIB alemán decreció en un 0,1% y el IWf calcula que ese decrecimiento aumentará hasta el 0,3% en el tercer trimestre del año.
Qué significa estar en recesión
En economía, una recesión es una contracción del ciclo económico cuando hay una disminución general de la actividad económica. Las recesiones generalmente ocurren cuando hay una caída generalizada del gasto (un choque adverso en la demanda). Esto puede ser desencadenado por diversos acontecimientos, como una crisis financiera, una conmoción del comercio exterior, una conmoción adversa de la oferta o el estallido de una burbuja económica de cualquier tipo.
Recesión por trampa de liquidez
Una trampa de liquidez es una teoría keynesiana según la cual puede desarrollarse una situación en la que los tipos de interés se aproximen a cero (política de tipo de interés cero) pero que ello no estimule eficazmente la economía.
Eso es exactamente lo que está ocurriendo con los tipos de interés en Alemania y en gran parte de los países Europeos.
En teoría, los tipos de interés cercanos a cero deberían animar a las empresas y a los consumidores a pedir dinero prestado a través de préstamos y créditos y a gastar, sin embargo, si demasiados individuos o empresas se concentran en ahorrar o pagar deudas en lugar de gastar, fijar tasas de interés más bajas no tiene casi efecto en el comportamiento de la inversión y el consumo.
En esta situación fijar tasas de interés bajas es como «empujar una cuerda». El economista premio nobel de economía Paul Krugman describió de ese modo la recesión de 2009 en Estados Unidos y la década perdida en Japón, dos ejemplos perfectos de trampas de liquidez.
Consecuencias directas para el mercado laboral
El impacto de una recesión se nota también en el mercado laboral, y el IWf ha confirmado que la tasa de paro en Alemania podría situarse del 5% al 5,2% o incluso más a lo largo del 2020. El incremento será todavía mayor para 2021 si las previsiones continúan según los cálculos. Esto significa que el número de personas empleadas en Alemania descenderá por primera vez por debajo de los 45 millones durante 2021.
Noticia Original en La Vanguardia