Cada vez son más los clientes de CaixaBank que se apuntan a la moda de las pulseras de contacto para realizar pagos en comercios. De hecho, el número de afiliados a este nuevo sistema de pago ya supera los 100.000 usuarios. Estas cifras han convertido a la Visa contactless en una de las experiencias de wearables para compras hasta el momento.

Ya son más de dos años los que lleva instaurado este sistema que cada vez parece conseguir más adeptos entre los usuarios de CaixaBank. Este sistema, además, es uno de los primeros de tipo weareables lanzados en España.

Hoy en día CaixaBank dispone de más de 12 modelos hipo alergénicos y ajustables entre los que elegir un sistema de débito, crédito o prepago. Este sistema es considerado como una tarjeta adicional a la tarjeta contactless de los clientes de la entidad financiera. Por este motivo, los gastos que se realicen a través de la pulsera serán cargados en cuenta según la modalidad que el cliente tenga contratada.

¿Cómo funciona la pulsera Visa contactless?

Muy sencillo, la pulsera lleva en su interior un microtag en el que se encuentra la información de la tarjeta del cliente que la utiliza. Estas pulseras están protegidas por el sistema EMV, al igual que el resto de las tarjetas de CaixaBank, para evitar robos o usos fraudulentos del dispositivo. Con este chip, la pulsera contacta con los datafonos para realizar pagos en los distintos comercios.

Su modo de empleo es similar al de las tarjetas conctactless: el cliente aproxima la pulsera la datafono y por proximidad el dispositivo realiza la operación. Si el pago es superior a 20 €, al igual que sucede con las tarjetas contactless, será necesario que el cliente incluya su PIN para validar la operación. Hoy en día el sistema es compatible con todos los datafonos de pago contactless.

La pulsera Visa contactless, un sistema seguro

CaixaBank vela por la seguridad de sus clientes y lo hace también con este dispositivo que cuenta con el servicio gratuito de CaixaProtect – para evitar el uso fraudulento de sus pulseras – y los beneficios de la tecnología EMV, por la cual, todas las compras realizadas con la pulsera se hacen de manera encriptada.

Está claro que CaixaBank lucha día a día para convertirse en una de las entidades financieras más punteras en lo que a mejoras tecnológicas se refiere. A día de hoy, el usuario de esta entidad financiera puede realizar todo tipo de pagos a través de muy diferentes dispositivos, como las tarjetas físicas, virtuales, la pulsera contactless o el pago a través de los móviles, además de poder gestionar absolutamente todos sus movimientos sin necesidad de desplazarse a la entidad financiera con la App Caixa Bank Pay. Además, la pulsera dispone de una app propia con la que llevar la cuenta de las acciones realizadas con ella. En esta aplicación, totalmente gratuita, se informa al usuario al momento de las acciones realizadas con su pulsera.

Poco a poco, CaixaBank está consiguiendo posicionarse como un auténtico líder tecnológico. A día de hoy dispone de 5 millones de clientes en banca online y 3 millones en banca móvil.

No es de extrañar por ello que durante este año esta entidad financiera haya recibido el premio “Retail Banker of the Year” reconociendo su excelente estrategia de innovación. Además, CaixaBank ha recibido de The Banker el galardón como “Mejor proyecto tecnológico del mundo” por el lanzamiento de imaginBank.