Descubriendo las ampliaciones de capital y los préstamos para capitalización
Muchas empresas, en determinadas etapas de su ciclo de vida, pueden tener la necesidad de realizar una ampliación de capital. Las ampliaciones de capital, a grandes rasgos puede decirse que se pueden realizar de dos formas:
- Emitiendo acciones nuevas
- Incrementando el valor nominal de las acciones ya existentes
En el primero de los supuestos, la ampliación de capital está dirigida tanto a accionistas ya existentes en la empresa que deseen adquirir nuevas acciones (los mismos tendrán derecho de suscripción preferente) con el fin de evitar que su participación en la compañía resulte diluida después de concluir el proceso de ampliación, como a terceros que con la ampliación de capital deseen incorporarse como accionistas de la compañía.
En el segundo de los supuestos, en el supuesto del incremento del valor nominal de las acciones ya existentes, la operación se estructura mediante el canje a los accionistas existentes de sus acciones por las nuevas con un valor nominal distinto y superior (o bien estampillando en las acciones existentes el nuevo valor nominal de las mismas).
Sea como sea, y tanto para los accionistas preexistentes como para los aspirantes a accionistas, los préstamos para capitalización suponen una herramienta muy interesante para poder acudir a estas ampliaciones sin tener que descapitalizarse particularmente.